Faro de buceadores perdidos
en la ciudad caótica del apuro.
Galeón del tesoro al alcance de la mano
para los intrépidos que desafían el olvido.
En tus escaparates se ofrecen las palabras
incitando al pensamiento
mientras antiguas voces reviven la ausencia
de caminantes incansables detrás de una utopía.
Letargo de vida latente pronta al vagido
con el simple acto de abrir un libro.
Último bastión de la duda
ante la solidez de la respuesta.
Devotos de la lectura respiran
el aire de plenitud anidada
entre los muros de las bibliotecas
donde el conocimiento es maná
para las almas colmadas por las ansias
de conocer a Dante, Confucio, Petrarca.
@poémama_poesía
#PoémameDíaDelLibro
9 Me gusta
¡Hermoso!.. Me gusta tu prosa. Encuentro los cortes de los versos un poco raro —apenas entré al poema, tuve esa sensación de que era prosa poética, pero no…— Bueee… creo que no importa este pequeño detalle, porque el poema logró su cometido: otorgarme un trozo de su pixelada belleza… Todo poema, debe llenar de alegría —aunque sea una alegría muda, sosegada— a todo aquel que ose leerlo y éste, lo ha logrado (¡gracias!).
Saludos.
¡Ahhhh…! Eres tú, Felicia. Es raro ver en ti poemas largos…Estoy tan mal acostumbrado a tus deliciosos haiku, son como bocados de sushi je, je, je
Que bellos y que sabios versos, esas bibliotecas que encierran en sus libros todo un universo de vidas, de sentimientos, precioso homenaje, poeta!!!
Hola mi querida Sensei. Precioso poema.
Un beso grande 
Gracias, que bueno que te guste.
1 me gusta
Gracias, tus palabras alientan.
1 me gusta
Jajaja gracias me alegra que estas letras motiven.
1 me gusta
