Primero: no debes negar que has caído.
Más noches habrá sin luz y ofuscaciones,
el espíritu impondrá sus condiciones,
querrá volver a ser reconocido.
Segundo: no escondas el daño conferido.
No cures con embustes tus lesiones,
ni extingas con excusas tus pasiones.
El dolor abluciona al desplacido.
Tercero: ve con calma. No presiones.
no necesita el sentir aquiescencia.
Habrá días sin fe ni explicaciones.
Pero si aún te niegas la licencia
si ves sólo complots y conjuraciones,
verás que amar devuelve la conciencia.