A las uñas partidas,
a las puntas melladas,
de ese sol cabizbajo,
de esa piedra blandura,
sin remedios caseros,
ni fragancias “descuento”,
una vela sin santo,
y un adiós de los viejos;
espesores de venas,
sotaventos en bolas,
blancas puras sin niños,
niños solos sin cuerdas,
como en tiempos del circo,
y de los cines domingos,
como cualquier otra cosa,
a lo que llames farola,
alumbra los senos del tonto;
para tus pies no sean cebo;
la rigidez de las tumbas,
no se han ganado algún premio,
esa es tu luz y resulta,
que anda encendida por dentro,
hazte de ella, no seas sombra,
Siempre hay mañana distinto.
Que la llama encendida en tu interior no permita sombras en tu vida.
Siempre hay esperanza de un mejor mañana.
Profundos versos!
Poema realista!
Saludos cordiales, Deisak!
La última parte me encantó, muy reflexivo. Abrazos cariñosos.
Gracias Mucio, muchas gracias. Saludos llenos de aprecio.
Muchas gracias Sinmi, un cariño de vuelta.
El hombre torna viejas sus horas en sus viejas costumbres…una comodidad peligrosa…Salud y poesía,Deisak!
Gracias Silve, muchísimas gracias.
Me gusta el ritmo de los versos que te llevan hasta la llama encendida. Saludos
Gracias Rrff, y yo encantado de vuestra visita. Un fuerte estrechón de manos.
Excelente y reflexivo poema. Un gusto pasar a leerte.
“para tus pies no sean cebo;
la rigidez de las tumbas,
no se han ganado algún premio,
esa es tu luz y resulta,
que anda encendida por dentro,
hazte de ella, no seas sombra,
Siempre hay mañana distinto.”
Muchísimas gracias Nora , cuan bueno, el que te haya surtido ese efecto. A gusto con emocionar a mis amigos
Besos para ti.!!!
Muchísimas gracias Lucía, cuan bonito tu expresar. Besos!!!
La luz siempre sera luz y la sombra, la proyección de una figura en ella,
tu poesia siempre sera luz, y mil sombras se proyectaran a en su espectro, y los santos colapsaran el mercado de velas, para que los barcos puedan navegar. —Gran poema Deisak —
Con un fuerte estrechón de manos, para ti, celebro y a gusto recibido, estas palabras tan cargadas de sustancias ciertas, de agrego valioso, a la idea de este poema, con las ideas tuyas, mi buen amigo y hermano Ludico.
Gracias Nora, gracias al arte, a las letras, a nuestro hermoso idioma, a Dios y a la inspiración, a Buenos amigos poetas como vos.
Siempre hay una luz aunque parezca que todo está apagado…
Siempre hay un mañana distinto.
Hermosos versos, Deisak!
Abrazos!
Así mismo María, es eso a lo que aferrarse, o nada. Agradecido intensamente por tu entrada y palabras, cariño para ti.