Uno ve tu foto y nos da curiosidad… curiosidad de saber quién es ese ser antiguo detrás de la foto. De perdernos por los vericuetos de esa casa tuya poblada de verdes…
Parece una casa duéndica donde en el jardín trasero lleno de macetas de arcilla roja, las hadas lepidópteras vienen a libar, el último néctar que se desprende en el ocaso.
Uno ve tu foto y provoca ir a visitarte para merendar contigo en los amarillos de septiembre, allí, en el porche… con un ponqué de avainillado limón y una rica taza de “Earl Grey” —el mío, con tres cucharadas de azúcar ¡¡Por favor!! je, je, je—.
Chane García.
@ChaneGarcia
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