La carta de disculpa

podría ser cualquiera de las sombras
que me han escogido
pero mi encanto reside en los fantasmas
y en las flores de mi tumba
que han enterrado todas las facetas
que casi desvelo,
ya no hablo con amigos
y parece que no han existido
porque el vacío se comparte
y el olvido es mutuo;
de todas mis pérdidas
esta no la he conservado
y de todas mis despedidas
esta no la he necesitado,
me gusta quedarme en mi sitio
si el mundo se mueve
porque me hace útil creer
que siempre seré un evento
y no una decisión:
aquello que parece necesario
es lo que mejor perdura.

a veces me siento culpable
por haber cambiado el mundo
de una forma irreparable,
porque lo que no estaba roto
ahora no se recompone
y los años pasan en balde
incluso para quien duerme cuando debe;
no estoy hecha para conservar la sangre
que han desperciado en mí
porque no hay momento en el que no retome
los pasos de mis antepasados y me juzguen
por haber dormido entre olivares
sin tenerme en sus planes,
aquí es donde acaba mi discurso,
todas las cosas que no he hecho
y que las voces me señalan
como símbolo de ingratitud.

y he dejado las cintas donde mejor sé guardarlas:
en el lugar más alto de la estantería
y donde abandono cualquier idea
que me haga echar en falta un reloj
porque mirar a la inocencia siempre
me ha dado vergüenza
y yo nunca he sido frágil
sin que alguien no lo supiera,
todas las luces me hablan
y parecen convencidas
de las ambiciones que han odiado
mi reflejo por años
porque no las he perseguido
tanto como lo hago con las palabras
que nunca me han dicho
y el amor que me han quitado;
tres versos con el discurso de mis fracasos
porque he nacido de personas
que parecen pájaros
y de linajes que se han clavado
en las puertas de los más buscados
y en los campos que nunca descansan,
porque los cuervos no tienen amigos
a los que no hayan devorado
por el fruto de la tristeza,
porque soy corredora de apuestas
y todos los caballos van en mi contra
y todas las oportunidades son doblones de oro
que no están a mi altura.

me despido en mi disculpa,
en eso que se aferra
como si estuviese destinada
a grandes cosas,
en algún lado del día
que me diga que hay tiempo para algo más
que no sea luchar y esperar
a que algo dé sentido a las cosas me faltan;
no escucho a Dios
y el universo se ha quedado renegado
entre pluma y cincel:
puede que no estén
y me hayan dejado tan abandonada
porque yo me he quedado.

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Tienes una forma de escribir, marmórea, fría, distante y a la vez cercana. Pareciera que el mundo te ha hecho daño y ahora tu quisieras vengarte de el, manteniéndote distante, relegándole al olvido. He de decirte que el mármol cuando se pule y se ven sus vetas, puede resultar tremendamente hermoso. Así veo yo tu poesía, como una belleza que surge de la dureza de la piedra y que resulta hermosa en su frialdad, bella en su soledad y evocadora en su mundo de silencio. Me pareces una gran poeta y este poema me parece excepcional. Un saludo.

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Tremendo! :clap: :clap: :clap: :clap: :heart:

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Muchas gracias! :smiling_face:

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Muchísimas gracias!! :heart: