Alguien juega sin ti;
desaparece la lluvia
espera la noche
ríe el silencio
Un tiempo para reconocerte
un espacio para descolocarte;
estás desorientada y amanece
Buscas pistas en tu cuerpo
huellas en la piel
marcas en el pensamiento
Alguien hace tiempo
olvidó tu nombre
y recorre mundos al revés
Habla de historias en los cuentos
y te nombra en las sombras
Eres otra y no recuerdas
eres la misma y no regresas.
Maravilloso Héctor, abordas lo prescindible del yo en el plano amoroso, también la vida como parte de ese juego que continua sin mi y sin “tigo” , y remarcas la ausencia como ese —! no va más¡— que expresa el croupier ante la rueda de la ruleta. como diciendo !no te pares rueda; rueda aunque falte el que no vino¡. aplausos.
Domingo, quiero agradecerte por encontrarle claridad a lo que a veces está confuso. Un gran saludo.
Esta clarito Héctor, «Alguien juega sin ti » el mundo sigue girando aunque se muera el que le echa aceite al motor que lo hace girar. otro vendrá en su reemplazo.
(desparecen la lluvia, la noche y el silencio) «un tiempo para reconocerte» los juegos son replicas de la vida, o la vida una representación de todos los juegos, y en ellos hay “entreinings”, segundo tiempo, tiempo extra, etc…
Así es, hace falta escribir para alcanzar lo que andamos buscando. Es a veces más simple de lo que nos lo creemos.
Espectacular!
Por un momento, al leerlo…me pareció que yo lo había escrito, tanto me identifiqué con esas letras…
Un intimista y hermoso poema!
Abrazos, Héctor!
Wallace, así es… el juego continua, muchísimas gracias por tus palabras. Mi saludo.
Tali, muchas gracias. Un saludo.
Hola, María te agradezco tu hermoso comentario. Un gran saludo
Que bueno, desde el propio título, has jugado muy ingenioso con las imágenes, poeta!!!