Es libro que no se hojea hacia atrás,
empastado por dos grandes silencios, incunable impreso en tiempo de papel.
Tipografía martillada en lingotes de estrellas
desde una imprenta infinita,
que a golpes,
acuña soles y planetas en ingrávido vacío.
Ni una página puede ser arrancada.
Ni un solo glifo puede ser borrado
en estos renglones de arcilla y nubes.
Letras emancipadas de su autor,
que para bien y para mal
llevan en sí mismas,
estiaje y fuego abril y flores.
Palabra escrita en tinta roja,
caligrafía que se cobija y ensortija
en capítulos de amor y odio
y traza una historia
que se precipita
desde el “érase una vez”
hacia el colofón
que leerá
llorando,
la eterna
soledad.
Una bella descripción lírica del libro la que hiciste, con un final precioso, Jesús. El libro es un tesoro…
¡Muchas gracias por participar en nuestro reto, compañero!
Saludos.
Palabras mayores las que imprime el lingote de estrellas, (que Hwellett Packard ni que Epson nada) aquí lo que imprime es un lingote de estrellas aproximado a la humanidad. Un gran Aplauso para un gran poema.
Muy bello, Jesús.
Cuánta pasión en tus letras. Eres todo un poeta.
Me gusta el sabor de tu poema y la explosión de emociones que derrocha.
Sabes, a mí me gusta leer mis poemas desde atrás en adelante… leerlos al revés. Es algo que cuando termino de componer lo hago y me resulta uf. Es más una maña mía, pero me gusta ver el resultado al revés.
Así es amigo @Rraffa, el libro de la humanidad que se auto escribe, con capítulos oscuros y relucientes, con fallas de ortografía, con argumento que nadie adivina el final. Con tachones. Con letras descollando de hermosas. Y por qué no, hermosos poemas. De todo hay en este libro que se esfumará en el espacio y nadie jamás leerá.