Aquellas páginas miniadas,
el incunable de las horas,
de la sacra música alzada
que un monje esculpe entre las rosas.
La palabra incendia la tarde,
la distancia que no perdona,
la historia de aquel caballero,
de aquella dama y su corona.
Van los vencejos dibujando
el verso de abril, la redoma
donde se decanta aquel libro
de un autor que la muerte toma.
Un corazón desmesurado
frente al mar, solitario, dona
la certidumbre de su olvido,
a aquella que la tierra aroma.
20 Me gusta
Precioso!
Muchas gracias por tu segundo aporte al reto, José Antonio.
1 me gusta
Muy lindo el poema, resumiendo en tu segundo reto, La Historia de la literatura
en aquel libro incunable de las horas.
Aplausos
Abrazos
1 me gusta
Muchas gracias por tu comentario. Un saludo.
1 me gusta
La literatura vista desde otro ángulo. Muchas gracias. Saludos.
1 me gusta
@Pradoalto … Maestro, “Chapeau”, nada como poder hacer cantar a las piedras…
1 me gusta
Gracias por tan amable comentario. Un saludo.
Todas las horas están en los libros. Un gusto leerte. Abrazos.
1 me gusta
Gracias por tu interesante comentario. Un saludo.
1 me gusta
Wowww que lindo, tambien gracias por ampliar mi vocabulario
Aquellas paginas miadas,
…
Miadas, no conocía esta palabra
me encanta el aroma de tu lenguaje @Pradoalto
1 me gusta
Me alegro que te guste. Un saludo.
1 me gusta
¡Gracias por participar en el “Reto Día del Libro 2023”!
1 me gusta
Sinmi
3 Mayo, 2023 01:18
17
Gran poema!!
Encantada de leerte. Saludos cordiales.
1 me gusta
Gracias por tus amables palabras. Un saludo.
Muchas gracias. Me alegro que te guste. Saludos.