Van por el mar Teseo, Jasón, Ulises.
Sobre el agua teje el crepúsculo
una red de tinta y oro que atrapa
minotauros, vellocinos, polifemos…
Sobre una balsa de hinchados maderos,
Lope de Aguirre, asediado por mosquitos,
busca El Dorado en las páginas de un libro.
Cada héroe persigue su destino,
triunfa o es succionado por su maelström.
Stevenson, Poe, London, Conrad…,
se deshojan a la luz del flexo.
Con qué dulce sobresalto, recuerdo,
llegaba la mañana sin haber dormido,
lector impenitente, apenas nada.
Era sugestivo no tener nada salvo tiempo;
ahora llega el sueño, pero no la madrugada.
Me encantó lo de ahora llega el sueño, pero no la madrugada ¡Todo es posible!
Saludos.
Héroes, protagonistas, autores legendarios…
Todo es posible en los libros…
Un hermoso y gran poema para nuestro reto!
Muchas gracias, José Manuel!
Gracias a ti, María, por impulsar este reto del día del libro. Abrazo, amiga
Bonito poema poeta. Saludos.
Gracias, Pedro. Saludos y buen día
Gracias por tu comentario. Saludos y buen día
Gracias, Walla, me alegra que te guste. Eres superbuena y amable. Un saludo amiga y buen día.
Guau! Este final es espectacular, José Manuel, por favor!!!
Gracias, Alejandro. Saludos cordiales, poeta
Gracias, Paco. Saludos cordiales
Gracias, Marta. Me alegra que te guste. Abrazos.
cuántas lecturas que nos quitaban horas de sueño