y soy como la Fontana de Trevi,
todos me ruegan por un deseo
y me vuelvo rica por momentos
pero solo el oro puede ser tan frío
cuando mis ojos no consiguen ver
el final de ellos;
mis lágrimas son eternas en la ciénaga
entre los ríos,
el óxido en mis partes escondidas nunca vio la luz
y ahora hay cobre allí donde toco,
cayéndose en los días lluviosos
hasta que me convierto en arena en las manos
de mis seres más queridos.
todos mis sueños están llenos de pérdida,
me despierto con el sonido de tambores
y podría dibujar senderos por mi espalda
de todas las guerras que intentan escaparme;
decoro las cabezas de mis enemigos con flores
para que pueda seguir amándolos
y actuó como un dios sin ley con los destinos
de aquellos que puedo salvar,
pero mi hogar solo sobrevive
con desastres naturales
y no puedo contener la adrenalina
de mi vergüenza
cuando mis ancestros me ven
como el engaño de años mejores.
y pongo un precio a mi tiempo
hasta que no puedo lidiar
con el fin de este mundo,
y me trago la tristeza hasta ser veneno;
todos mis lados están vacíos,
todos los dolores son míos:
¿no es poético cómo mis cuerdas
me estrangulan en aire seco
y te mantienen a salvo
en mi propia muerte?