Hoy las nubes juegan a barcos y las gaviotas chillan lamentos.
Se ha enfadado el aire de todos los vientos y riza furioso los bucles del agua.
Pero yo solo miro mi estrella dorada. La que nunca se oculta tras nubes obscuras. La que siempre consigue que tenga claridades del alma.
Tu poema es como la chispa de un instante suspendido entre furia y ternura, donde las tormentas ceden ante esa estrella, la que ilumina el rincón eterno del alma.
Muchísimas gracias AljndroPoetry Un saludo muy cordial