Va cayendo el cielo
en las casas,
sucede sin remedio
y sin más
en cada despertar;
brillan los ojos
como estrellas en fuga,
acompañan los cuervos
en calma
y abrigan la noche
de quienes aún sueñan;
y en cada gesto,
todo lo que sucede en un solo día
se escribe con la sangre
del cuerpo
y su movimiento perfecto y libre.
hermoso tu poema como siempre.
Felicidades
Gracias, bonita mía 
Tú lo has inspirado, que lo sepas 
muchas gracias, me sonrojas…
Eso es bueno, amiga 
Hoy las palabras están en un saco rumbo al fondo del mar…
Que el océano nos dé más y nosotros aprendamos a no ser tan egoístas con lo que realmente nos alimenta.
Un buen poema.
Sé feliz.
Abrazos.
Armonía perfecta y esperanzadora donde sentirse abrigado, poeta!!!
brillan los ojos
como estrellas en fuga,
acompañan los cuervos
en calma
y abrigan la noche
de quienes aún sueñan;
tan bello !!
Perfecto. No se puede decir más. Saludos.
Este precioso remate final es el giro que le diste al poema, el quiebro…que es tan frecuente en tu poesía y la embellece…
Beso grande, mi Tali! 
Aurora, muchas gracias!!! 
!
Por eso nos compartimos, mi Ivka. Gracias mil y muy buen día
El apoyo mutuo, compañera, siempre!
Aiiii, qué bonito comentario, María mía…Gracias!!! Siempre me alegras los días
Muy bello poema. Muy onírico.
Excelente. Saludos.
Ay, nunca me habían dicho eso
Gracias!!!
Gracias, Juan Carlos!
