Un bar al fondo,
mesa de mármol, silla de madera,
en la ventana el ruido de la lluvia,
lámparas que acumulan muchas guerras;
—Antonio, el camarero, aburrido en una esquina—.
…
Sentado, gris el pelo,
frente cruzada por mil ríos,
cigarrillo en los dedos, cabizbajo,
una mano que duda en el espacio,
chaqueta desgastada en el respaldo.
…
Toda su esperanza está dormida
en el fondo de un vaso de ginebra,
por eso tanta prisa en acabarlo.
…
Al final aparece un simple vidrio,
lugar donde navega la mirada
con pasos perdidos en la niebla.
…
Llenarlo de nuevo, turbio anhelo;
sabe que el espejo siempre vuelve…
Tristes ojos que reflejan un naufragio.