Es tiempo de sequía en este tórrido verano.
El aire escupe fuego
sobre la piel dorada de una tarde adormilada.
Anulados los sentidos,
solo perciben los silencios
detenidos en las calles.
Pequeña muerte en las aceras empolvadas.
Oídos sordos de entoldadas lejanías.
Ni el tren acaso, que arrastra un sopor lento
en los ecos solitarios del andén.
Reloj parado con la puerta cerrada a cal canto.
Sudor y hastío emprenden un viaje imposible e inacabado.
Tintas fuertes reverberan en las rejas
recién pintadas
de la casa de enfrente.
Aromas imposibles de clasificar
se pierden enredados en la calma
de un patio inundado por el sol inclemente
que filtran hacia dentro,
las vidrieras de color.
Mis manos, detenidas sobre un papel imaginado.
Respiro lento e intento descifrar los sentimientos.
Todo me es ajeno, hasta el dolor de no escribir
con trazo firme o delicado.
Sequía de rayos que no cesan.
Sequía en el alma que obtura los recuerdos.
Sequía en el pecho que te impide respirar.
Gritar el nudo que se ha hecho
entre el vacío y los llenos imperfectos
de esta desesperante sequedad.
El mundo, parece que se para
en el reflejo del espejo.
Son momentos interruptos y finitos
de una blanquecina laxitud
en los espacios de la casa, donde
no se mueve nada.
Solo un grifo que gotea, poco a poco, en soledad.
Y mi cabeza aletargada no lo puede asimilar.
Ni consigue deslizar, una letra en el papel.
Es tiempo de sequía en este tórrido verano andaluz.
Sudor y hastío que regresan del viaje.
La tarde,
cayendo va…
Julio 2020
Foto de mi autoría: Casa Museo de Juan R. Jiménez. Moguer. Huelva.
Sequía de rayos que no cesan.
Sequía en el alma que obtura los recuerdos.
Sequía en el pecho que te impide respirar.
Gritar el nudo que se ha hecho
entre el vacío y los llenos imperfectos
de esta desesperante sequedad.
Subyugantes versos María! y preciosa foto.Abrazos!
Mientras tú transitado por calles soleadas y calurosas, yo salgo a la calle solo por necesidad porque el frío hiela mis huesos y la melancolía y los días lluviosos hacen una mescolanza de sentimientos. Me encantó tu poema caluroso. Abrazos
Al sudor y al hastío aunque los veas haciendo las maletas, no se van, vienen una y otra vez, tienen apartamento fijo y se divierten derritiendo neuronas, el verano no es la época más poéticamente evocadora, pero compruebo que se sobrelleva con versos dignos como costumbre. Hoy te envío un soplo de aire fresco amiga!
En la lectura se va sintiendo el abrasante calor de tus versos que nos regala tu pluma en este tórrido estío.
Un hermoso poema que se disfruta de principio a fin!
Abrazos afectuosos, María