Eran sus ojos gotas de lluvia,
Creo,
Sus miradas podían resbalar, mojar el alma.
Así se podía poner uno a lavar el corazón
Toda la tarde.
En esa paz de sus huesos uno descansaba.
Y era lagartija bajo el sol,
Soñando con amores de ranas.
Tus ojos,
Tan solo tus ojos eran frescas verdades
Para las mentiras del alma.