Era

Era tan hermosa, tan inteligente, tan fiera, tan libre, que podría haber estado con cualquier hombre que se propusiera, pero por algún motivo que todavía no alcanzo a comprender, ella me eligió a mi. Yo, un simple mortal, perdido en mi propio camino, y sin más pretensión que la de sentirme libre, sentirme realmente feliz por una vez en la vida y olvidarme del mundo que me rodea, incluso de mi propio ser, fui a parar a los brazos de esa semidiosa. Era tan hermosa, tan inteligente, tan fiera, tan libre, tan mujer.

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Me ha gustado ese principio que se hace final y además aprovecha para dar una definición más certera.

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Gracias compañero.
Un saludo

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