Era yo un ave

Me reconoció… Era yo un ave.

[Era yo una palabra gris.
Sonido de lluvia retorcida
en la memoria bautismal
de un espejismo]

La infancia de esa deidad
me llevó a sus ojos,
latiendo ornamentos de trigo
a epílogos binarios
en la faz cerrada de un mirlo.

Y tras tres silencios acabados
sonó el milagro del advenimiento
de lo que seré, entre sarmientos
y paradojas de sangre en la madera.

:camera: Pinterest

de repente

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Hermosa revelación poética, Héctor. Abrazo!

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Una delicia de poema compañero.

Un abrazo :slight_smile:

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Muchas gracias Juan. Mis saludos cordiales!

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Eres muy amable mi querida poetisa! :smiling_face_with_three_hearts: :hugs: :writing_hand: :bouquet: :wine_glass:

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Muchas gracias, Hortensia. Mis saludos afectuosos!

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Belleza y originalidad en tu atmósfera surreal!
Un cordial y poético saludo, Héctor!!

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Muchas gracias mi querida Silvia. Un abrazo grande y feliz domingo! :hugs: :bouquet: :writing_hand: :wine_glass:

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Bellísimo descubrimiento en tus líricos y sublimes versos, sus ojos te descifraron, poeta!!! Abrazos!!!