"Cada vez que abro los labios
inundo de nubes el vacío.
En el puerto,
los mástiles están llenos de nidos.
Y el viento
gime entre las alas de los pájaros."
(Vicente Huidobro)
…
Enhebrando silencios
en las fauces de una tarde
que no es mía,
ni tuya, ni de nadie.
Tarde de cielos tiznados,
de brasa candente
por dentro.
Ovillado el pensamiento,
me resguardo en un diluvio
que me apague
y me traiga la calma.
Sobreviviendo a tu poesía…
te presiento en una lejanía de ojos grises
como instante
que renace tormentas
y hace vibrar los vientos que se cuelan
en mis oquedades vacías.
Y veo pasar
los pájaros huidizos de tus rimas
volando en mi mirada,
como soles heridos
en las soledades de una esquina.
Arrastrando poemas,
caminas por el aire
de unos versos sin destino
alejando fantasmas
de lo que pudo ser y nunca ha sido
…y te imagino
bebiéndote esa lluvia discontinua
que murmuraba siempre
detrás de tus ojos.
Sobre estrofas
(que perforan silencios)
vas huyendo
de la nada de ti mismo,
sobreviviéndote…
y rompiendo en mil fragmentos…mis olvidos.
Tu noche
es una página en blanco,
herida abierta
en el estrecho espacio de soñar,
de lo que fuimos.
Y oigo un rumor
de letras sobre el río que te lleva…
…y te aleja(s).
Perdida ya la senda
¿dónde quedan tus huellas, poeta…?
Epílogo final.
(No siempre
entendimos el camino.)
(A un poeta anónimo)
Mi foto: Río Guadiana fronterizo. Huelva