Corramos a sentir la desbandada
y sentémonos juntos de cara a la ventana.
Lleguemos pronto a la estación desierta
que luego, lloraremos en voz baja.
No seremos dos muertos que caminan en vano,
ni tendremos un lecho dónde yacer temprano.
¡Y pasará la tarde…como pasa el verano!
Miraremos de lado, desfilar los paisajes,
como se mira adentro de las cosas amadas
y nuestros corazones sabrán de despedidas.
Será un adiós tranquilo, tal vez breve, muy breve…
Y si acaso preguntas si todavía te amo,
verás rodar dos lágrimas en el último instante…
y seremos un cisne
que agoniza en la tarde…
Ahhh que delicadeza, que sensibilidad, esa despedida con amor, la más dolorosa que se puede sufrir, un cierre maravilloso!!! Saludos poeta!!!
Gracias Ana Maria, por tus bellas palabras. Un abrazo.
Tremenda despedida, tan sutil, y a veces tan necesaria…
Precioso.
Bedazi
Precioso y dulce
Me gustan tus imágenes y el carácter intimista que le imprimes a tu poema.
Un gran gusto leerte.
Saludos.
Gracias querida Cecilia por tu paso por mis letras. Abrazos poéticos.
Cuánta hermosura desbocada hay en tu poesía. Me sentí arropada por una suave seda al leerlo. Abrazos!!
Qué nostálgicos y hermosos versos. Abrazos cariñosos.
Gracias Jana, por venir a mis letras. Abrazos poéticos.
Qué bueno que te guste mi poema. Gracias por pasar, Horacio.
Gracias jessi, por pasar y comentar. Abrazos poéticos.
Qué bueno que te gusten, Sinmi. Me agrada tu visita a mis letras. Un abrazo poético.
esa melancolía romántica de tus poemas, traspasa !!
Miraremos de lado desfilar los paisajes,
como se mira adentro de las cosas amadas
y nuestros corazones sabrán de despedidas.
Será un adiós tranquilo, tal vez breve, muy breve
Gracias poeta, qué bueno verte en mis letras. Recibe mi afectuoso saludo. Un abrazo poético.
Muy bueno!
Gracias, José. Muy amable por pasar.
Es muy hermoso.
No puedo citar nada.
Abrazos.
Muy amable por pasar a leerme, querida marttucca. Un abrazo.
No pudiste ponerle mejor título…todo el poema es un susurro hermoso y melancólico. Ojalá la despedida real fuera tan serena!
Abrazos, Lucía.