Hoy, me despierta
ese verso descarnado
con el frío de sus letras
rasgando mis escarchas,
sin apósitos
ni edulcorantes
que resguarden
ese desnudez
hasta entonces desconocida,
del bostezo inmune
que significa
amanecer
bajo el verbo “amar”
Yo, que derroché
lágrimas incendiarias,
insomnios rebeldes
y guiones ilícitos
embadurnados,
a través de la palabra,
creando un universo
un universo idealizado
bajo la patria
de una única piel
resulta,
que es tan solo
mi ensoñación
en la “Ínsula Barataria”
Y me reconozco
cada vez más,
en todos mis espejos
como aquel caballero,
de razones utópicas
y sinrazones ilustradas,
¿ le recordáis?
le llamaron
el de la “triste figura”
y quizás como él,
después de cabalgar
durante tantos desvaríos
persiguiendo un sueño,
debiera abrazar la muerte
recobrando
o tal vez, no
ese juicio juicioso
que me deletree
el significado
del verbo “amar”
Referencias: “Ínsula Barataria” “El caballero de la triste figura”- Don Quijote de la Mancha (Miguel de Cervantes)