Una reflexión me persigue últimamente y me pregunto, casi hablándome a mí misma, ¿por qué nadie te dice que todos vamos a rompernos al paso de los años?, ¿por qué nadie te advierte que un día estarás roto irremisiblemente y quedarán pedazos de tu vida colgados de tu corazón ya triste, sin remedio? Has visto a todos los que conoces romperse uno a uno y tú…en la fila. Y entonces te preguntas si debes decirles eso a tus jóvenes hijos o es mejor que crezcan sin saberlo.
buena reflexion que deja interesantes preguntas
Así es compañero. Siempre la pregunta. Gracias por comentar. Un fuerte abrazo
Esa reflexión, querida Fabiana la apreciamos pensando en ella siempre.
Es un postulado de la vida. No hay que pensar siempre en ella y dejar que los avatares de nuestra existencia pasen como pasan. Ya nos llegará algún día nuestro final después de ver los finales (como bien dices) de amigos y parientes. Pero la vida sigue. Y mientras vayamos con ella debemos ir disfrutándola, de manera de inspirar a nuestros hijos la idea de que se hace cambo al andar…
Es lo mejor que podemos hacer. Hasta e fin.
Abrazos
Así es estimado Pedro, a veces nos detenemos a pensar por qué ciertas experiencias no son transmisibles y es que hay que vivirlas para saber. Pero no decae el ánimo por eso. Solo reflexión. Y ahora…a ser felices, que rotos ya estamos todos jajaja. Un fuerte abrazo!
Se percibe una reflexión sincera sobre la fragilidad humana y la inevitabilidad del paso del tiempo.
Me gusta como se van planteando preguntas profundas sobre la experiencia de envejecer.
Así mismo es estamos de acuerdo
Abrazo
Así es querido Ale. Creo que la misma reflexión contiene su respuesta. Gracias por comentar. Abrazo fuerte
Muy buena reflexión…pero yo creo que sin que nadie nos lo diga, es la vida y sus azares la que nos habla de ello.
La vida y la muerte caminan juntas…
Un abrazo fuerte y disfrutemos mientras tanto!
La gran pregunta y duda al mismo tiempo… quizá nacemos rotos, amiga poeta…
Así es María. Muchas gracias por tu comentario. Un fuerte abrazo
Quizás, quizás. Gracias compañera. Abrazo.
Gracias Walla! Yo decido que ellos mismos lo descubran. Y ojalá la vida sea benigna con ellos. Un fuerte abrazo