Sueño con un sol
en el dormitorio,
suspiro con los recuerdos
que se deslizan en mi mente
como un cisne al emprender
el vuelo en la laguna.
Todo en mi memoria
esta noche es sobrio,
el libro de la vida
que escribimos es historia y
la incluimos de inmediato
en nuestra fe perdida.
El corazón en descanso se prepara,
aunque dejamos atrás el pasado
siempre nos alcanza e
inexorablemente volvemos
a la realidad intranquila de la tierra
pero con la vista puesta
en los horizontes suaves del mañana.
Crearemos grandes espacios,
emprenderemos nuevos viajes,
dejaremos atrás la sensación de vacío,
volaremos para atraer nuevas
esperanza e ilusiones,
con ellas formaremos nuestro cielo y
así seremos los reflejos del
mundo que añoramos
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