En la locura de la tormenta
en un remolino de espumas,
navegaban unos vocablos
en una maraña perdidos
de palabras extraviadas.
La solemnidad de un requiebro
obligó a un calamar inquieto
a derramar sobre ellos su tinta,
la ilusión se hizo cordura
y el océano sentimiento.
La palabra se hizo emoción
el sotavento animó las olas
las frases se tornaron verso
el barlovento sopló ligero
y la mar se convirtió en poesía.
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apina
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Qué original y refrescante tu poema.
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La mar…siempre es poesía…🩵🌊
Muy original!
Me alegra lee!rte, tus versos no defraudan nunca.
Un abrazo y buen Día de la Poesía, Pedro!

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¡Muchas gracias por participar en el reto poémamedíadelapoesía!
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Muchas gracias, me alegra que te guste.
Saludos.
Siento tardar tanto en contestar. He andado algo ocupado.
Gracias por tu comentario, María.
Un saludo.
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