Un pedazo de luna se ha dormido
entre los blancos lirios y ha dejado,
luz de ceniza, un hondo y demorado
perfume de silencio entristecido.
Las rosas cauterizan el gemido
de la aurora, y su rojo y desolado
murmullo, se acompasa en el gastado
perfil de la mañana y su latido.
Este jardín secreto desafía
ausencias, voces rotas,la alegría
de una dulce sonrisa ya olvidada.
Se han borrado ya todos los caminos.
La muerte ha secuestrado los destinos ,
y ha dejado la casa abandonada.
Bellamente tus letras capturan la melancolía y la belleza efímera de un jardín, mientras se enfrenta el peso de la ausencia y la muerte.
La decadencia del jardín desolado…que al final, es la vida.
Bello soneto! 
Genial, aplaudo la continuidad del hilo narrativo, dentro del estricto patrón métrico sin ninguna señal de ripio ni signos de relleno. Una excelente pieza. aplausos.
Ese jardín secreto, nuestra juventud, escondida en esa casa abandonada. Muchas gracias por tu comentario. Un saludo.
Muchas gracias por tu comentario, tan preciso y exacto, sobre este jardín oculto en nuestro Interior.
Muchas gracias por ese comentario sobre la estructura del poema. Un afectuoso saludo.
Me ha encantado. Parece que los cuartetos ponen el tema sobre la mesa y los tercetos lo resuelven de forma magnífica. ¡Brutal!
Muchas gracias por saber ver- y apreciar- la esencia del soneto. Un saludo.