Sonaban las campanas de la tarde,
el azul oscurecía y se secaban las flores del jarrón,
se abrieron las luces de la taverna
y las del cielo al salir la luna.
Se oian ruidos, se adivinaban silencios,
se apreciaban siluetas en las sombras
entre el humo de las alcantarillas.
La estufa calentaba la estancia
y la luz de veinticinco daba un cierto resplandor,
un niño lloraba, se oía un tenedor haciendo una tortilla,
el calor de la cocina, el olor de la cena en el fuego,
el sonido que cierra el cerrojo
y un abrigo rojo colgado detrás de la puerta.
Francamente no se donde estoy,
tal vez tengo un vago recuerdo, una leve sensación
de haber estado en un lugar parecido,
de tener algún recuerdo escondido de la infancia,
de haber pisado algún charco después de la lluvia
o de haber visto alguna película muda
en aquel cine que hace tiempo que cerró.
Francamente no me acuerdo
si fue un sueño, un espejismo o tal vez sucedió.
Tengo un difuminador guardado en mi cabeza
en un rincón secreto que no recuerdo ni yo.
(*Valgan estos versos de homenaje a mis padres y a todas las personas que terminaron sus días afectados por la enfermedad del Alzheimer)
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Muy sentidos y descriptivos tus versos ,todo una vida que se difumina, se pierde en las tinieblas, tristísima enfermedad, toda son crueles pero está en especial, es malévola con los seres queridos del enferm@, preciosos versos, poeta!!! Saludos!!
Dicen que la lectura es como medicina para esa enfermedad. Por eso todos los días procuro leer aunque sea una página hasta que llegue el día que no queden letras en la hoja de papel.
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Lo hago mío, compañero. Mi madre también padeció Alzheimer en sus últimos años. Sé lo que es, lo que sufren, lo que sufrimos todos a su alrededor.
Muy bonitos versos de recuerdos que fueron… o no.
Abrazo.
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Imagínate los dos… después de 50 años ni se conocían.
Gracias por tus bonitas palabras y un abrazo también 
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La lectura y tener la mente trabajando. La poesía es un buen antídoto. Muy bien dicho compañero.
Un abrazo 
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Qué sentidos y emotivos versos, @J.marzo. Un gusto leerte. ¡Saludos!
Muchas gracias Alejandro por tus palabras.
Un fuerte abrazo 
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Muchas gracias Magdalena. Eres muy gentil.
Un abrazo para ti
Precioso homenaje!! Me ha encantado cómo has descrito ese ambiente del recuerdo perdido en una nebulosa de sensaciones del pasado…
Aunque es una enfermedad cruel, que borra de la mente los vestigios de toda una vida. Yo la viví con mi abuela, vivía con nosotros.
Un abrazo fuerte, Xavier!
Si Maria es una situación que muchos hemos tenido que vivir al ver que a los que nos habían dado la vida y hecho quien somos se les difuminaba poco a poco la memoria y el conocimiento.
Gracias otra vez y un fuerte abrazo para tí
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Muy profundo y hermoso poema. Un terrible tema este.
Gracias por el poema.
Saludos Xavier.
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Gracias a ti por leerlo Horténsia
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