Hay un lugar donde van a morir los libros,
los que se dejan de leer o nunca se han leído,
permanecen atrapados en la tumba del olvido
en innumerables estanterías que semejan nichos,
sienten la indiferencia, la soledad y el abandono
mientras los lectores persiguen los superventas.
Permanecen en un mundo silencioso y triste,
donde no se escuchan las risas de los niños,
viven atrapados entre polvo e indiferencia
y sus personajes envejecen entre hojas de papel,
que poco a poco van empezando a amarillear
mientras su blanca celulosa se va entristeciendo.
Es penoso caminar sin rumbo por su espacio,
ajenos a su soledad y al desamparo de sus letras,
ahora que el mundo se vive en las redes sociales
y la gente es feliz recibiendo likes y haciendo memes,
mientras, la cultura se desvanece imperturbable,
en un cementerio de libros olvidados en Barcelona.
Tienes razón amigo… ¿Cuántas historias, cuántos sueños, cuántos versos olvidados en el estante…?
Buenos versos amigo!! Me alegra verte de nuevo por aquí.
Un abrazo grande
Gran poema y gran tema! Leí los cuatro de Zafón y me introduje en el misterio que encerraba ese cementerio…
Es muy romántico lo de los libros olvidados, los describiste bien.
Me alegra leerte otra vez, muchas gracias por este poema para nuestro reto!
Un abrazo, Pedro!
El mundo de papel amarillo existe, es paralelo al nuevo, llegan a nuestros estantes olvidados y muertos en algunos casos. Solo los que dejamos el corazón en esto sabemos la vida de un libro…por eso muchas veces, hay gente que aprecio y les regalo una botella de vino que se van aprovechar…les regalas un libro y no lo abrirán nunca y no me gusta matar palabras.
Así es…triste…
Muy bueno y, me alegra que sigas, leerte, saberte de pie…
Precioso poema, Zafón es uno de mis autores favoritos. He leído todos sus libros. Me dio mucha pena su muerte. Sus seguidores nos quedamos un poco huérfanos.
Zafón era un gran escritor y con unas ideas muy innovadoras sobre la narración. Lástima que muriera tan joven, seguro que nos habría dado muy buenos ratos de lectura.
Un placer pasar de nuevo por aquí, yo también me alegro de leerte de nuevo a ti. Un abrazo María.
Es cierto, su muerte fue una lástima, seguro que quedaron muchos mundos por narrar en su imaginación. Yo también leí todo lo que escribió y me gustó mucho.
Así es, los libros siempre permanecerán en el recuerdo de alguien o sobrevivirán sobre estanterías llenas de polvo. A no ser que pase como en la novela de Ray Bradbury “Fahrenheit 451” y tengamos que guardarlos en la memoria para que sobrevivan.
Que sensación más real y desoladora a la vez nos presentan tus versos, pero aquel que ama la lectura al igual que la vida siempre querrá palparla, olerla, disfrutarla con todos los sentidos, poeta!!!
desgraciadamente hay libros que caen al mundo del olvido por diversas razones; pero hay muchos más que viven eternos en la mente de aquellos que los leyeron. Un saludo
