Una tarde la encontré, seguí su luz…
mucho anduve, sin saber, que me alejaba
mas no pude escoger, pues me llevaba
la luz, sin yo querer, no se hacia donde…
No me di cuenta ¡Ay mi dios! Que oscurecía
a medida que avanzaba tras su ruta,
porque nada me importó ya entonces nunca
de todo aquello que una vez yo perseguía.
¡Que era de amor la luz, no miré al cielo!
Seguí por el camino que trazaba…
¡Pobre yo, que no quise parar cuando podía
y ya no supe volver de dónde estaba!
Y después…cuando perdido me encontraba
la luz que yo seguía …se apagó.
Una vez que se fue me encontré solo
y hasta aquello que antes tuve… ¡Se eclipsó!
"¡Que era de amor la luz, no miré al cielo!
Seguí por el camino que trazaba…
¡Pobre yo, que no quise parar cuando podía
y ya no supe volver de dónde estaba!
Y después…cuando perdido me encontraba
la luz que yo seguía …se apagó.
Una vez que se fue me encontré solo
y hasta aquello que antes tuve… ¡Se eclipsó!"
Y después…cuando perdido me encontraba
la luz que yo seguía …se apagó.
Una vez que se fue me encontré solo
y hasta aquello que antes tuve… ¡Se eclipsó!
Una gran obra Maw…tiene esos elementos conceptuales que amarran al lector, y esa arritmia propia de los poemas concebidos bajo premisas retoricas (como me gusta a mi construirlos) que generan tiempos diferentes en los mismos cuadrantes musicales…!Bravo¡