Ya estos dos primeros versos pellizcan el corazón.
Entiendo el poema como una conversación con un hijo al que se quiere proteger pero sin embargo sabemos que debe salir del nido, arriesgarse, vivir.
El poema actúa como una capa envoltorio de temores y ansiedades sustentadas en la fantasía, de alli una fábula despierta las auroras de un mañana incipiente en la cronología de alguien cercano y en su mente. —Aplausos.