Llorar hasta sacar el dolor
que llevas dentro,
llorar hasta que las lágrimas
lleven consigo
el deseo de estar muerto.
A solas llorar,
sin que nadie nos vea,
ocultar para el mundo
está patétitica pena,
este llanto por nada,
que nada ni nadie consuela.
Caer en un sueño profundo
y cansado
o resignarse a la vida
y no seguir esperando,
a que los días no duelan,
a que no duela el pasado,
aprender a soltar
aquellos sueños que vuelan,
aprender a cargar nuestro
equipaje pesado.