Distopía del absurdo

                                                                      Para: Susana Reyes y su escritura de los espejos

Versos escritos con tintas invisibles. Rostros que no miran. Pasos perdidos en el infinito de la nada. Libros polvorientos, versos desdentados. Un espejo empañado en la aurora de los últimos instantes. Ruido de trenes, de mariposas. Asfalto. Tormenta. Versos que se evaporan. Gusano o serpiente. Abecedario mentido.

                                                         He caminado por el Zócalo,

                                                                        por Garibaldi,

                                                      por el Palacio de Bellas Artes.

                                                                He ido por el norte,

                                                                      por Tijuana,

                                                            cerca de Búho Negro.

                                                       Cruce el Canal de Panamá,

                                                                     fui en metro,

                                                                    en submetro,

                                                           en cable, en funicular.

                                   Fui por el sur, por Necochea, por Quenquén,

                                                                     por Dante.

                                                               El poeta no está.

                                                                   Ha muerto.

                                                      Descendió a los infiernos.

                                        Ha quedado disuelto en el vecindario

                                                                   su perfume

                                                        de azufres imposibles

                                                                   y milenarios.

                                                                    Nos miente

                                                                  el abecedario.

                                                                             (…)

                                                                                                                          Leonardo Fabio Marín

                                                                                                                                San Salvador
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Muy bueno tu final.
Saludos.

Oh, gracias por valorar esa imagen del cierre. Es la crisis frente a la búsqueda de la palabra precisa o el verso adecuado-

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Algo así me vino a la cabeza.

Si señor, lo mas difícil del poema es el final…