Espejismo ecléctico -
hemos marchado y no sé por qué,
casualmente he salpicado con los remos
rincones noctívagos de los sexos
mi puro y su cigarro atrapándose en el humo,
la pérfida creación extraviando sus auroras,
rellenando de tulipanes amarillos
mis discapacitadas ansiedades.
Un herraje de similitudes,
ella y yo - como prólogo de vesanias
pista forestal donde cruzarán los corazones
traduciendo cerbatanas en el aire,
crucigramas de tarántulas flotantes,
la derivación de lóbregas costumbres
sensaciones del árbol conmovido
de nuestro hogar imprenentable.
Te concedo un exabrupto o un examen,
efusivos deseos para llenarnos de alguien,
cambiar o fluir, un enojo sin motivo,
ridículas palabras que rajen el silencio,
una escena donde siempre estemos juntos,
un culpable en vigilia de tus los labios
un demente al tomarlos sin permiso,
los niños mientras, durante y depende
declaremos nuestro nombre compartido
un recreo al otro lado de la muerte.