¡Muchas gracias, José Antonio!
Y es que con el insomnio, así no me duerma, llega un momento en que la persona deja de ser productiva… al menos a mí me pasa, y a otros amigos que también sufren de insomnio.
Uff que bien has reflejado líricamente ese gran problema tan acuciante y demoledor del insomnio que nos trastoca la vida, sufrirlo es un verdadero martirio, amiga poeta!!!
¡A veces estás tan agotado y, aunque parezca un oxímoron, menos logras conciliar el sueño! Recuerdo una frase de madre: “No encuentro acomodo” …y luego, al siguiente días, hayas dormido 3 horas o 7, igual te toca trabajar o encargarte de lo que debas…
En fin… ¡Me alegra mucho tu comentario!
¡Sabes que siempre eres bienvenida a navegar mis letras!