Maravilla de poema Marie.
Soñar es gratis, y a veces los sueños se cumplen, y si son los sueños de estos magnificos versos que nos regalas, pues aplausos cariñosos para tí.
Soñaba, yo, que catabas
la pura miel de mis labios,
sin malicia, sin agravios,
y soñaba que me amabas.
Soñé, también, que soñaste
que eras feliz a mi vera,
Ufff… vaya sueño hermoso… vaya hermosos versos de ensoñación con los que abres el velo de tu poema onírico.
Y esas dimensiones anidadas del sueño son una genialidad.
De sueño en sueño, soñamos
que el despertar se alejaba
y a volar nos invitaba
al Edén al que aspiramos.
Y en el jardín de los sueños
no había reptil que quisiera
corromper, aun si pudiera,
a dos amantes risueños.
Maravilloso guiño al relato de los inicios de la humanidad y su caída, esta vez con un final feliz