De corazón

Náufrago en tierra de otros,
y a ti
te espío apátrida

De corazón

Hay cierto lamento detrás
de un crimen.
Como un sicario
prometo inmortalizar
tu dolor.

¡Cómo creciste en mis ojos!

Huésped de otras noches.

Nadie te culpará,
después.

Nadie te abrazará de exilio en esta expiación.

Silencios de ataúd.

Y al evidente culto de fe
me abandono,
y de pensar como antes,
aprendo
cómo te dueles en mi lugar

Y en mis suburbios

momentáneamente, esta rutina como señal.

¡Eso es amor!

Si de corazón, en mí, creces.

8 Me gusta

Ahh que bello, que versos más delicados y sensibles, sí a veces somos apátridas, la única patria es la del amor!! Un fuerte abrazo Martín!!!

1 me gusta

Hermosos estos versos tuyos que parecen flotar en el aire, desde detrás del alma…
Abrazos, amigo!

1 me gusta

Delicadeza en estos versos. Precioso poema.

Saludos :slight_smile:

1 me gusta

Versos hermosos… que te llevan con delicadeza… Saludos, Martin.

1 me gusta

Qué giro más sorprendente al final. Muy bueno Martín!

1 me gusta