Dame un beso mientras la noche dure
un beso rosa, inmenso, que no acabe,
porque la vida es corta y no se sabe
si hay algo eterno que nos la asegure.
Dame un beso apasionado que cure
el dolor que aqueja, como un jarabe
que tus labios derraman lento y suave
y mojen los míos y me sature.
Que arda rojo como brasa mi pecho,
mis pies tiemblen y se nuble mi vista
cuando des el beso que me provoca.
Nada es tan dulce, ni de tal provecho,
por eso no hay fuerza en mí que resista
el deseo de morir en tu boca.