El dolor que me causa no entender,
que no lata mi pecho,
que sienta el soslayo de la brisa…
El dolor viene de antes,
viene de cuando no era libre,
viene del tren, de los instantes,
viene del fuego, su caricatura,
viene del sol cuando no acecha mis pasos
y solo veo sombra.
Viene de la ventisca imaginaria,
viene de las costillas agrandadas
por el estrés, la depresión, el sufrimiento, la agonía.
Antes no era justo
cual realidad que vivía.
Nube que me situaba,
no me dejaba ver,
como un niño buscando gastar
para rellenar un vacío.
Ahora te das cuenta
que el dinero no cae de los árboles…
amigos tampoco.
Ahora te das cuenta
que soñar, siendo ingenuo, es ley.
Pero cuando escapas, vives,
aconteces, acaudalas
un riego de pensamientos.
Anocheces antes
porque te da miedo la noche.
Te levantas antes… o ni te levantas.
Te caes estando levantado.
Te da envidia cómo se sienten los otros.
Te dan lástima tus ojos,
tus apegos,
tus hombros
que no están derechos…
ni tus desahogos.
este es un poema bastante reflexivo y personal