De los que en esta era viven
casi nadie ya recuerda
que no siempre fuimos hombres
presos de pequeñas cosas
hace mucho, mucho tiempo
todos éramos gigantes
y de aquel vivir gozoso
celebran estos cantares
sosteníamos el mundo
con la fuerza de titanes,
cruzábamos vastos mares
cual si fuésemos atlantes
extendiendo nuestros brazos
gobernábamos los vientos
y llegábamos al cielo
ascendiendo entre tornados
en las noches despejadas
cosechábamos estrellas,
lo hacíamos a puñados
escogiendo las más bellas
Mas de forma inesperada
los océanos menguaron
se alejaron las estrellas
y los vientos amainaron
fue entonces cuando ocurrió,
que perdimos nuestra gloria;
la grandeza nos dejó
sin dejar ninguna huella
y en humanos transformados,
sin saber por qué razón,
hoy vivimos nuestros días
en perenne frustración
la memoria de aquel tiempo
tú la puedes rescatar
en tus sueños permanece
sólo tienes que buscar.