“Y qué sabe el sol
de noches oscuras
que se hacen eternas.”
(De: Soles, lunas y pétalos-
Alejandro Cárdenas).
Hay momentos de la vida,
que atesoramos con cuidado
en los profundos recodos del alma,
para que el sol no se entere.
Recuerdos, convertidos en sueños,
que guardamos en sitios reservados
y en valijas seguras de noches oscuras.
Momentos ermitaños y tan nuestros,
protegidos como crías recién paridas.
Muchas horas vividas
entre lechos, parques, países
y ramas envejecidas,
que se hicieron eternas.
Hay instantes de la vida,
que abrigamos con nostalgia
detrás de cerrojos solitarios
y puertas silenciosas
También ha dicho Alejandro Cárdenas @AljndroPoetry (respecto al sol)
«Y si tengo yo mismo
que ir a hacer girar el sol
y encender el candil tras cada lucero
de tus tristes noches grises,
que así sea . . .»
Aplauso para ambos…son geniales.
Ah qué maravilloso tu poema estimada poetisa.
Y que lo abras con esos humildes versos de alguno de mis poemas, es algo que me ha sorprendido sobremanera.
Te lo agradezco de corazón. Un fuerte y cálido abrazo.
Momentos ermitaños y tan nuestros,
protegidos como crías recién paridas.
Hay instantes de la vida,
que abrigamos con nostalgia
detrás de cerrojos solitarios
y puertas silenciosas
Ah caramba, doblemente agradecido en este poema. Gracias por traer esos versos del recuerdo por aquí también estimado amigo poeta.
Ciertamente, me gusta mucho girar alrededor del sol, de las estrellas, de cometas, de asteroides, de constelaciones, del cosmos entero en mis poemas. Soy un enamorado total de todo lo astronómico desde el punto de vista de la astrofísica.
Momentos tan íntimos, que guardamos y abrigamos en lo más recóndito del ser.
Un día Lucía, al preguntarle a una ancianita en una residencia el por qué de su sonrisa, ésta me contestó que ahora vivía de sus recuerdos.
Algún día esos recuerdos que de manera tan íntima guardamos, podrían ver la luz a través de nuestras sonrisas y lágrimas.
Un abrazo.