**No hay extensión más grande que mi herida,
lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.
Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
- Fragmento de “Elegía a Ramón Sijé” (Miguel Hernández)**
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El dolor,
agarrado con sus zarpas
al costado de mis recuerdos.
Oprimiendo cada primavera,
cada mayo con su junio.
Desconsuelo sin consuelo,
recordando los olores,
los abrazos y las risas…
siempre cada mayo con su junio.
Y le hago cajita de oro
al corazón de la niña
que allí en el tiempo que fue
sigue jugando con tus juegos.
Y vuelvo a sentir dolor
cada mayo con su junio.
Y huelo a ti
cada mayo con su junio,
Y creo en ti,
cada mayo con su junio.
Y viví en ti,
cada mayo con su junio.
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Este poema de Miguel Hernández me hiere siempre que leo o escucho recitar a alguien.
El poema va a mi padre…cumplía años en mayo y murió en junio.
Es un poema escrito en palabras mayores por la doble circunstancia motivadora, el primer significante elegíaco , establece una relación entre el nacimiento y la partida física del padre de la poeta y la segunda circunstancia es alegórica al poema de Miguel Hernández de modo que el núcleo lírico, posee los dos estribos necesarios para cabalgar por el tiempo sin riesgo de abruptas caídas — desde mí interpretación es un poema escrito desde el corazón—aplausos.
