Nuestras almas saltando por dentro
y nuestros corazones agitándose sin parar.
Al igual que nuestras sombras cuando bailan en la oscuridad del amanecer.
Allí fuera está saliendo el sol, pero nosotros seguimos brillando,
a nuestra manera.
Aunque se vean sombras,
por dentro se ven luces volando por el cielo que hacen recorrer e iluminar nuestro cosmos.