Uff que bueno, descriptivo y reflexivo ese azul, ese sentimiento, intentando traspasar esas fronteras que tanto nos cuestan, que tanto nos limitan, así es aventurarse o morir, todo un dilema vital, amiga!!!
Como siempre… es una bellezura leer tus cuadros textuales —cuadros, pinturas hechas de textos—. Si Ud. fuese una artista plástica, una pintora, una experimentada acuarelista… Ud. sería la propia Johfra Bosschart en versión femenina. O una Doménika Theotokópoulas haciendo esas mezclas de colores ultraterrenales.
Querida Mari. Precioso, y muy intuitivo poema, como todos los tuyos.
Lo enmarcaría completo porque es todo ambrosía su lectura. El cuadro lo a merita. Te aconsejo: Aventurarte…, porque la última opción sería pasar la línea roja…, y por ella pasaremos todos.
Me ha encantado tu poema.
Un millón de gracias y abrazos por él.
Me encanta el azul, ya le hice otro poema a ese color tan hermoso…
Aventurarse es arriesgado, pero sin riesgo sería muy aburrido vivir…
Gracias, amiga! Un besazo, Mina!