¡Excelente poema amiga!
Síiii, la avena es una planta sativa (se cultiva diferente a lo silvestre), cuya semillas son las que conocemos y sí, son como el centeno, las espigas, los trigales…
La analogía con el olvido es fantástica!!
Felicitaciones María, mis aplausos!
Gracias
La locura, el olvido, el cereal. Me plantaría como planta agreste y silvestre a saborear tus versos en el desayuno; (proyectan más delo que dicen) una rara energía emana y se sitúan acariciando o flagelando áreas contrarias en los sentidos y el intelecto cede, como hipnotizado por tu palabra. —Aplaudo, me ha encantado.
Mi querida y siempre muy preciada Mari.
He saboreado tu poesía, toda ambrosía.
Son tan lindos los versos, cayendo uno tras otro con una musicalidad que enternece su lectura, rítmica, sonoramente agradable al oído con su silencio a gritos bajitos y encantadores.
Felicitaciones y aplausos.
La guardo.
Abrazos
La avena loca por aquí es la silvestre, una mala hierba que invade los cultivos. De ahí el poema…
Gracias por tu acertada apreciación, la utilicé como metáfora del olvido que arrasa con todos los recuerdos…
Un abrazo, querida Betty!