Armadura

Arriba están bien sujetos

por el sustento

de los que aguantan

inquebrantables abajo

los que nunca se retiran

a pesar de soportar

esa pesada carga.

No estarán tan mal

cuando no se apartan

—lamenta alguien—.

No pueden, andan prisioneros

de su resignación

y su condena humana.