Arde el mundo
y un tímido réquiem
me acompaña…
arde lo ansiado,
el deseo
y las ganas de ser…
arde suave,
arde en rojo…
arde…
como la vida de ayer.
Obra de Jaanika Talts
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¡Preciosos versos! 
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Muchas gracias, compañera. Besos!!!
Un poema muy plástico, muy gráfico, amiga. De un rojo anaranjado…
Muy bello, Carmen! 
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Muchas gracias, María… Besos! 
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Precioso Carmen.
Besines miles.
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Muchas gracias, Martu.
Ahh me encanta esa forma de arder acompañado de un Réquiem me parece la forma más sublime
y seductora de ascender a los cielos!!!
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Simplemente Hermoso amiga. Besitos y abrazos.
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Tal vez podamos arder en nuestras propias cenizas para renacer de todos los ayeres…Muy bellos poema e imagen,Carmen!Un cariñoso saludo!
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Arden tus versos… Como la vida de ayer, qué añoranza.
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Jeje… me alegra que lo hayas sentido así! Muchas gracias, amiga… 
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La admiración es mutua querido soñador, vaya que sí… Te mano un abrazo incombustible a las montañas del norte.
Muchas gracias, Sin. Besitos y abrazos.
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Quizás podamos renacer en un nuevo mañana, compañera. Muchas gracias por tu lectura, Silvia. Besos!
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Pues sí… qué añoranza Alejandro. La realidad que estamos viviendo no se parece en casi nada a la que teníamos hasta hace relativamente poco. Todo se ha trastocado…
Muchas gracias por venir, amigo.
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Rojo y calor en tus versos. Bellísimo
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Muchas gracias, Rafa. 
Bella forma de versar en este poema matizado de rojos que llevan a pensar en la vida misma. Un gusto pasar.
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Muchas gracias Lucía… Un gusto recibir tu visita.