De esta tierra tuya y mía
cuentas debemos echar,
si tan sólo por medrar
nadie del otro se fía.
Por eso con ironía
el contrapunto funciona
cuando apenas se razona
en este tipo de foros,
donde igual que meteoros
a casi nadie perdona.
Porque el pensamiento ofende
está claro en ocasiones,
cuando son las confusiones
las que el ego igual nos vende.
Pues a presumir se tiende
si más remedio no queda
y que cierto honor conceda
del cual poder echar mano,
cuando hasta resulta humano
el actuar como proceda.
Cuando un exceso de flema
la conciencia perjudica,
si luego igual se publica
y se embarulla el problema.
Que el ambiente está que quema
para andarse con enredos,
si faltar me faltan dedos
para contar enemigos,
si al mezclar brevas con higos
todo me importa tres bledos.