Dejo el amor bajito
y las grietas en su origen,
atrapadas las palabras
en un exilio sin epitafio
que nadie lee;
y la arena se hizo piedra
hace años,
entre vítores y aplausos
de tu lado,
lejos del momento que inventaste
para luego enterrarlo,
dibujando el dolor ajeno
que haces tuyo y enloquece;
visitas el desierto
para jugar con las estrellas
y prometer la luna cada vez,
dejando su lado oscuro aparte
para no sentir los cráteres
que nos habitan;
te fuiste como llegaste,
y no dijiste adiós.
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Bello arranque!
Hermoso poema, compañera! Saludos.
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Gracias, hermosa!
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Ese título, qué quiere decir, Tali??
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Está en catalán, es “A ti que olvidas”.
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Gracias por sacarme de la duda…
Muy hermoso!
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Muy bien desarrollado en este poema el dolor que se instala cuando uno olvida y el otro sigue amando.
Versos preciosos, Marta
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Nos queda escribirlo. Gracias!
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Hermosos versos, para no olvidar
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Gracias! Y para quien los bordó sin preguntarme