A placer los bribones se cobijan
y así nos lo demuestra aquí la historia,
que en el poder de forma aleatoria
las mafias medio ocultas se transijan.
Basta que leyes similares rijan,
para que la ruleta de la noria
aleje la justicia de la escoria,
y al saco sus tentáculos dirijan.
No esperemos retazos de esperanza
que nos puedan legar manipulados
por los más sospechosos intereses,
porque esta gente al engordar la panza
nunca creen estar equivocados
y en nuestra contra vuelven sus reveses.