Lo hiciste bien.
Vete tranquilo.
Ahora que el camino
llegó a tu fin.
Te fuiste en la calma,
de saber que tu bondad
no te permitió dañar a nadie.
Lo hicistes bien,
padre,
y todos lo sabemos.
Navega como un capitan intrépido
en los mares bravos
de lo desconocido
embarcado en los besos,
de tus hijos,
huérfanos de ti,
huérfanos de tu amor.
Verás como vencerás
a la muerte
eternamente,
en paz,
en el lugar donde llegan
las buenas personas
como tú,
Padre.
Lo hiciste bien,
y todos lo sabemos.
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Gracias Amiga
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Muy buenas letras, felicidades.
Saludos, Maria Mercedes
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Qué bonito poema y qué mitigante, en trances tan duros, es tener la certeza de que tras la partida inevitable algo queda: el sustento legado por Ellos, que lo hicieron bien. Gracias.
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Ufff… un poema maravilloso. Es un placer leerte.
Un hermoso poema a alguien tan importante como es un padre…
Saludos, compañero!
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