A mi madre, en su día

Mi madre está mirando la montaña ;
mientras , yo la contemplo en la distancia,
con la mirada absorta de esta infancia
imposible, que oculta lo que daña.

En mi retina queda esa artimaña,
esa breve ilusión , esa fragancia
del tiempo recobrado, la sustancia
de una tarde cumplida, que no engaña.

Te echo tanto de menos, madre mía,
que planeo tu recuerdo cada día,
y vuelvo a ser el niño ensimismado;

este, que desde un hondo sufrimiento,
sabe que todavía me reinvento,
en un atardecer, contigo al lado.

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Muy hermoso tu soneto construido sobre la añoranza de la madre ausente.

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Muchas gracias por tus amables palabras. Saludos.

Precioso y sentido soneto, ese “te echo de menos” implica toda una melancolía y un recuerdo vivo y querido, poeta!!!:hugs::hugs::hugs:

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Un recuerdo siempre presente y doloroso. Muchas gracias por tu comentario. Un saludo.

Hermoso soneto! Nunca las olvidaremos…:rose::rose:
Un abrazo, José Antonio.

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Me caen todas las lágrimas en este poema tan bello e íntimo, José Antonio, maestro… Gracias por estos versos! :clap: :clap: :clap: :heart: :kissing_heart:

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Un recuerdo para mí.madre. Sólo eso.¿Qué más se puede decir? Gracias por el comentario. Un saludo.

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Gracias a ti por leerlos. Saludos.

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Es bellísimo.:clap::clap::clap::clap:

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Muchas gracias. Me alegro que te haya gustado. Un saludo.