Qué soy
sino barco en un charco,
ojos de lluvia
pintando espejismos,
hoja de papel mojado.
Me vuelvo tormenta
en cada ausencia,
náufrago
en el agua de un vaso.
Quiero ser pez,
y soy pescado.
La espina de una rosa
de negros pétalos.
No más que el índigo
en el iris de un arco.
De la diana, el blanco.
Solo un grito de auxilio,
unas manos
buscando el contacto,
queriendo alcanzar
un te quiero
que nunca ha llegado.
Excelentes versos. Saludos😎
Muchas gracias, compañero .
¡Precioso!
¡Ni para que decirte que el final “me mató”!!!
Bello, mi Wallace
El final es una flecha al centro del pecho…
Ay, mil gracias, Alda .
Hay pesimismo en el poema,pero también asoma un rayo de luz tras algunos versos:
Bello. Abrazo.
Muy hermoso Walla, me encantó
Genial
Me encanta esa frase con que lo has definido, Carlos.
Muchísimas gracias .
Buscando te quieros a veces naufragamos . No importa,vlos seguimos buscando. Precioso♥️
Qué somos y qué queremos ser…
Por lo pronto tus versos tienen un horizonte en ese precioso final!
Hermoso poema, mi compi querida!!
Muchas gracias, Joaquín, compañero.
Abrazo de vuelta .
Letras bellas que hacen brillar tus poemas. Me complace leerte.
¡Abrazos cariñosos, querida Mrs. Wallace!
Qué bonito tu comentario, amiga.
Muchas gracias. Feliz semana .
Muchísimas gracias, querida Vari .
Preciosas imágenes de contrastes Wallace, tremendo discurrir y gran remate. Precioso poema, gracias por traerlo!
Mil gracias, Cecilia.
Muchas gracias, querida María.
Te mando mil besitos .
Uff, hermoso este poema!!!
Preciosos versos… que gritan impotencia.
Muy bueno